Camino de la cultura Don Fructuoso García Escobar
Este camino forma parte del proyecto de la red de caminos
dentro del área recreativa, que estamos construyendo en nuestra finca, en Villa
de Ves, Albacete.
Este” Camino de la cultura” se ha creado, a base de piedra,
con nuestras propias manos, dedicando mucho esfuerzo y horas de nuestro tiempo
libre, con tesón y constancia.
Onomástica de este camino:
Hemos dedicado este camino a nuestro amigo D. Fructuoso
García Escobar, persona muy conocida y querida en el mundo de la cultura, ya
que era escritor, con una amplia trayectoria literaria. Nació en Villa de Ves
en el año 1944 y falleció el 23 febrero de 2022.
Fue una persona muy querida por todos los que hemos tenido
la suerte de conocerlo. No sólo destacó por su faceta literaria, también poseía
muchas de las virtudes que hacen grande a una persona: Tolerancia, solidaridad,
respeto, empatía, justicia, integridad, honestidad, entre otras.
Por todo lo expuesto, se puede afirmar que Fructuoso fue una
persona que ha dejado huella en la historia y el recuerdo de todos los
villadeveseros; un recuerdo indeleble en los que tuvimos la suerte de conocerlo
y ser sus amigos.
Estas son las razones por las que mi mujer, Manoli Cruz
Estudillo, y yo, Vicente Jiménez García, hemos decidido honrar la memoria de
Fructuoso, poniendo su nombre al camino de la cultura.
Especificaciones del “Camino de la cultura”:
Realizado por Manoli Cruz Estudillo y Vicente Jiménez García
Onomástica: Camino de la cultura D. Fructuoso García Escobar
Ubicación: Villa de Ves (Albacete)
Tiempo empleado en su construcción: Contando diversos
elementos como la base para exposición, esculturas y el propio camino, sumaron
un total de 2500 horas.
Material empleado: Piedra del lugar, cemento, dos piedras
monolitos, esculturas, diversos azulejos para la técnica de “trencadís”,
catorce sabinas albares (juniperus thurifera) y quince placas de cerámica con
inscripciones dedicadas a escritores y escritoras.
Placas de cerámica en honor de algunos escritores y escritoras destacables en nuestra cultura. Conviven con sendas sabinas a lo largo del camino de la cultura.
Don Juan Manuel:
Sobrino del rey Alfonso X el Sabio, don Juan Manuel es considerado el
máximo representante de la prosa castellana del siglo XIV. Su obra más
relevante es El conde Lucanor.
El señorío de Villena, gobernado por Don Juan Manuel incluía a Villa de Ves, entre otras poblaciones.
En una de sus obras literarias, El libro de la caza, se puede leer una frase que menciona que en Ves y en Alcalá (de Júcar) hay garzas cerca del río Júcar, pero que los lugares no son adecuados para cazarlas con halcones debido al terreno difícil.
"...nin en Ves nin en Alcalá, pero en el río de Xúcar á alguna garça, mas non en buen lugar para la matar con falcones..."
Humanista, escritora y políglota, forma parte de las escritoras renacentistas
llamadas “puellae doctae”, muchachas doctas. Estas mujeres, provenientes
de familias de la nobleza y de altas esferas intelectuales, recibieron una
excelente formación cultural y participaron de la vida cortesana debido a
su gran conocimiento.
Estando al servicio de la infanta María, Luisa Sigea compuso su primer
poema Syntra, y, posteriormente, Coloquio de dos doncellas sobre la vida
áulica y la retirada (1552).
Lope Félix de Vega y Carpio, conocido como el Fénix de los ingenios, es
uno de los poetas y dramaturgos más insignes del siglo de Oro.
Escritor prolífico, cultivó todos los géneros: el lírico, el narrativo y el
dramático.
Escribió más de 1000 comedias. De entre sus obras, destacan La dama
boba, El perro del hortelano, Fuente Ovejuna, Peribáñez y el comendador
de Ocaña.
Traductora y ensayista, Josefa Amar encarnó el espíritu ilustrado femenino.
En su ensayo Discurso sobre la educación física y moral de las mujeres
(1790), Josefa defiende la capacidad intelectual de las mujeres y su derecho
a la educación, así como a romper las paredes del ámbito doméstico y a
participar en la esfera pública.
José Zorrilla:
José Zorrilla es considerado el mayor exponente del Romanticismo
conservador y tradicionalista, corriente que se caracteriza por un ardiente
patriotismo. Aunque escribió numerosos poemas, leyendas y dramas, su
obra cumbre es el drama romántico Don Juan Tenorio, que se estrenó con
gran éxito en Madrid en 1844.
Emilia Pardo Bazán nació en La Coruña en el seno de una familia
aristocrática, lo que le proporcionó una gran educación. Fue escritora,
periodista y catedrática. Cultivó todos los géneros: escribió poesía, ensayo,
artículos periodísticos, crónicas de viajes, novelas e incluso alguna obra
dramática. De entre sus obras, destacan La cuestión palpitante (1883), La
Tribuna (1883) y Los pazos de Ulloa (1886).
Novelista, catedrático, periodista y académico de la Real Academia
Española. Fue reconocido con importantes galardones como el Príncipe de
Asturias de las Letras en 1982 y el Premio Cervantes en 1993. Sus obras,
traducidas a numerosos idiomas, reflejan la realidad social de su tiempo.
De entre ellas, destacan La sombra del ciprés es alargada (1948), El
camino (1950), Las ratas (1962), Cinco horas con Mario (1966) y Los santos
inocentes (1981), esta última llevada a la gran pantalla por Mario Camus en
1984.
Ana Mª Matute fue novelista y académica de la Real Academia Española
desde 1996. Fue galardonada con importantes premios como el Premio
Nacional de las Letras Españolas (2007) y el Premio Cervantes (2010).
Aunque destacó en la literatura infantil y juvenil, es considerada por
muchos como una de las mejores novelistas de la novela española de
posguerra. Como muestra de su prolífica obra, se encuentra la novela
Pequeño teatro, escrita cuando tenía diecisiete años, pero publicada once
años después; Los hijos muertos (1958); Olvidado rey Gudú (1996); y la
colección de cuentos Los niños tontos (1956).
Benito Pérez Galdós es el autor más destacable del realismo español. Su
obra narrativa es un reflejo de la realidad política, social y psicológica del
siglo XIX a través de sus personajes y sus conflictos.
De entre sus obras, destacan los Episodios Nacionales, una serie de 46
novelas que retrata la historia de España del siglo XIX. Otras obras son
Fortunata y Jacinta (1887), considerada su obra cumbre; Doña Perfecta
(1876) o Tristana (1892).
Gertrudis Gómez de Avellaneda:
Nacida en Puerto Príncipe, se instaló en La Coruña a los 22 años de edad.
Su vida estuvo marcada por su rebelión contra las convenciones sociales y
su defensa de los derechos de la mujer. Reconocida por su poesía, novela y
teatro, es considerada una figura relevante del Romanticismo hispano. Su
obra más destacable es Sab, considerada la primera novela antiesclavista
de las letras españolas.
Leandro Fernández de Moratín:Leandro Fernández de Moratín cultivó diversos géneros; sin embargo,
alcanzó mayor fama con la comedia neoclásica. En sus obras, buscaba una
finalidad didáctica, retratando y ridiculizando con éxito las malas
costumbres de la época. Su obra más famosa es El sí de las niñas (1806), en
la que se critican los matrimonios concertados.
Fue una de las autoras más destacadas del siglo XVII. Cultivó todos los
géneros: fue novelista, poeta y dramaturga. En su obra, defendió la libertad
y la educación de las mujeres.
Miguel de Cervantes es considerado la máxima figura de la literatura
española. Su vida, repleta de aventuras, enriqueció su obra literaria en la
que se refleja la cultura, el desencanto y la preocupación de un periodo
histórico cambiante.
Su obra cumbre es El ingenioso hidalgo Don Quijote de la Mancha.
Considerada la primera novela moderna, Miguel de Cervantes la publicó
en dos volúmenes (1605, 1615).
Lo intentó con su pasión, el teatro. Sin embargo, no consiguió el éxito
deseado, pues la escena teatral estaba copada por las obras de Lope de
Vega, quien fue su gran rival literario.
Isabel de Villena:
Bautizada como Elionor Manuel de Villena, adoptó el nombre de Sor Isabel de Villena tras ingresar, siendo muy joven, en el monasterio de la Trinidad de la ciudad de Valencia. Además de la calidad de su obra, escrita en lengua valenciana, Isabel de Villena sobresalió por su carácter culto, su creatividad y su gran imaginación, especialmente en una época en la que las mujeres debían vencer numerosos obstáculos para acceder a la educación y, aún más, para hacerse escuchar. En su obra más famosa, Vita Christi, narra la vida de Jesucristo desde el punto de vista de las mujeres que lo rodearon, otorgándoles un valor que se les tenía vedado en la época.

Para seguir recordando a Fructuoso y mantener vivo su
recuerdo, sus dotes personales, su legado literario y el amor que dispensó
siempre a su pueblo, hemos elegido un poema de Miguel Hernández que le gustaba
recitar a Fructuoso y que, por su letra, refleja la humildad y la amabilidad
que abundaban en nuestro amigo.
Las abarcas desiertas:
Por el
cinco de enero,
cada enero ponía
mi calzado cabrero
a la ventana fría.
Y
encontraban los días,
que derriban las puertas,
mis abarcas vacías,
mis abarcas desiertas.
Nunca tuve
zapatos,
ni trajes, ni palabras:
siempre tuve regatos,
siempre penas y cabras.
Me vistió
la pobreza,
me lamió el cuerpo el río,
y del pie a la cabeza
pasto fui del rocío.
Por el
cinco de enero,
para el seis, yo quería
que fuera el mundo entero
una juguetería.
Y al andar
la alborada
removiendo las huertas,
mis abarcas sin nada,
mis abarcas desiertas.
Ningún rey
coronado
tuvo pie, tuvo gana
para ver el calzado
de mi pobre ventana.
Toda gente
de trono,
toda gente de botas
se rió con encono
de mis abarcas rotas.
Rabié de
llanto, hasta
cubrir de sal mi piel,
por un mundo de pasta
y un mundo de miel.
Por el
cinco de enero,
de la majada mía
mi calzado cabrero
a la escarcha salía.
Y hacia el
seis, mis miradas
hallaban en sus puertas
mis abarcas heladas,
mis abarcas desiertas.
Gracias a todos por vuestros reconocimientos y el apoyo que nos dais.
Vicente y Manuela.