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La creación de este blog se debe a mi interés por recuperar las raíces de mi pueblo: su historia natural y popular.

viernes, 5 de agosto de 2011

HUERTO DE JUSTO


HUERTO DE JUSTO EN EL CENTRO DE LA FOTO
DEBAJO DEL LAVADERO DE LA FUENTE BUENA
JUNIO 2011

El huerto de Justo es un huerto que regentaba un señor de la antigua Villa de Ves y, anteriormente a él, me imagino que sería de otro morador de la Villa, pero ya no tengo más información.
Este huerto es muy famoso de nombre, pero poco conocido físicamente en el sitio, pues mayormente era conocido por todos los que íbamos al lavadero, pues en la parte de abajo del lavadero y en la parte de arriba del huerto había y hay unos granados una higuera. A su vez, los que íbamos allí, queríamos coger sus frutos pero estos árboles tenían muy mal acceso, ya que nacen en unas grietas del cinto y todo su tronco y ramas cuelgan hacia el huerto, como si estuviesen flotando en el aire o colgando de un hilo, suspendidos en el aire; así que, coger una granada (que nos gustaba muchísimo, ya que era una fruta escasa en estas zonas) conllevaba un peligro enorme, ya que podías caer al vacío e irías a parar al huerto de Justo con una altura de unos 30 metros aproximadamente, por este motivo nuestras madres nos reñían y nos decían "cuidado a ver si vais a caer al huerto de Justo". Nos lo repetían una y mil veces, por eso es por lo que digo que todo el mundo lo conoce de oídas o, visualmente, desde la parte de arriba, pero, físicamente, muy pocos. Los chiquillos de entonces estábamos acostumbrados a ir por el campo, por el monte o por donde fuese, y no teníamos miedo ni a las zarzas ni a las piteras que había que salvar para acceder al tronco de los granados o de la higuera, pero el cualquier visitante que vaya a la zona, si se fija, podrá comprobarlo.



HUERTO DE JUSTO: ENCAJONADO EN EL FONDO DEL BARRANCO DE LA FUENTE BUENA (O RAMBLA DEL CHARCO)

Este huerto está situado en un subparaje del paraje de la fuente Buena, en la parte de abajo de ésta. Este paraje es sin duda otro lugar de interés de nuestro término municipal, con una gran belleza paisajística, natural y ecológica. En este huerto todavía se conservan algunas hormas de piedra para hacer los bancales, donde después sembraban las hortalizas o los árboles. Hoy en día quedan restos de hormas, con parras, olivos, almendros, que enredados entre hierbas, arbustos y zarzas, luchan por sobrevivir contra todas las adversidades naturales, y os puedo asegurar que estos árboles que os he nombrado viven aun sin estar cultivados.


HORMA DE PIEDRA PARA HACER UN BANCAL

Para comprender este huerto tenemos que transportarnos 100 años atrás , pues entonces aprovechaban cualquier porción de terreno para cultivarlo, pues donde no podían hacer cavallones plantaban un frutal o hacían una horma, o en el ribazo plantaban una higuera. En conclusión, aprovechaban todo el terreno, y como tenían agua de sobra de la que bajaba del lavadero y de la fuente, esto hacía que tuviesen buenos  y rentables cultivos, lo mismo en hortalizas o frutas. Estas frutas y hortalizas servían para consumo propio y el resto para venderlas a otras familias o aldeas de alrededor para hacer dinero, que buena falta hacía en aquellos tiempos.

TESTIGO DEL PASADO


ESTE ES EL TRONCO DE LA ÚNICA GARROFERA QUE EXISTIÓ EN EL TÉRMINO DE VILLA DE VES
JUNIO 2011

Esta garrofera a la que hago mención y de la cual hoy solo queda el tronco colgando del cinto, como resistiéndose a caer y a desaparecer, hace unos años atrás, no sé cuántos, vivía perfectamente y de eso nos da fe un testigo e hijo del pueblo, el buen amigo y vecino Porfirio Martínez, buen conocedor de esta zona.
Una curiosidad es que, aunque parezca extraño ver una garrofera en Villa de Ves, si uno piensa un poco, tiene una explicación, y es la siguiente. Villa de Ves, río abajo, está cerca de Valencia, y, como los patos de la Albufera de Valencia se desplazan río arriba, vienen por estos parajes (yo los he visto varias veces) y transportan en sus heces semillas de garroferas que, al defecarlas, hacen posible que nazca la garrofera que, acompañado del microclima que hay en estos lugares, hace posible el desarrollo y la vida de este árbol que no es de nuestra zona.


LA MEJOR FORMA DE DISFRUTAR DE ESTOS LUGARES, UNA PARADA CON ALMUERZO Y DISFRUTAR DE LA NATURALEZA

Al fondo de esta foto y hacia la izquierda está la cascada de agua que cae desde arriba de la fuente (en estos momentos cae cuando están llenos los depósitos o cuando llueve, pero aún así siempre hay una pequeña caída de agua). Esta cascada da gusto verla y tiene un atractivo especial ya que es como una semi cueva hacia el cinto, seguramente hecha por la erosión del agua de tantos años, las paredes de la cascada están llenas de enredaderas y helechos culantrillo.


VISTA DE UN GRANADO PEQUEÑO Y SU FLOR QUE, CON ESTE VERDE TAN ESPECIAL, MUESTRA LA VIGOROSIDAD DE LA NATURALEZA EN ESTE LUGAR

En este lugar, debido al microclima tan especial que hay, se desarrollan gran diversidad de plantas y árboles, como granados, higueras, olivos, almendros, parras, fresnos, pinos, cornicabras, zarzas, juncos, piteros, romeros, espinos y un largo etc.
Cómo llegar: Para acceder a este sitio, podéis ir en coche hasta la era del pico y aparcáis debajo del castillo; seguís andando por el camino que va a la fuente Buena, cuesta abajo. Cuando comencéis a llanear, veréis una alcantarilla de cemento a la izquierda, pues en ese mismo sitio, fijaos, veréis restos de la senda que os llevará, sin duda, al huerto, aunque hay tramos que se pierde, pero enseguida se localiza cuando lleguéis al huerto. Lo bonito es subir a la misma cascada, cuando veais que las zarzas os franquean el acceso a la cascada, retrocedéis 10 metros, subís un pequeño terreno que hay a la derecha (con cuidado) y ya tenéis vía libre para acceder a la cascada y un buen espacio para estar sentados y daros un buen almuerzo. Disfrutadlo.
Consejos: Llevad calzado apropiado, gorras, refrescos, agua o zumos. Si vais con algún niño, no pasa nada, id con cuidado. Cuando vaýáis por la senda, no hagáis mucho ruido y quizá veáis algún milano cazando o a las cabras montesas.